La caña de azúcar es una gramínea tropical, caracterizada por un tallo dividido en nudos y entrenudos, recto, alargado, macizo y sin ramificaciones, con un tamaño promedio de 3.5 metros de altura por 5 a 6 cm de diámetro. El tallo es la parte más importante y es considerado como fruto agrícola, pues es donde se concentra el azúcar. Las hojas pueden llegar a medir 4 metros de longitud. En la parte superior se localiza la panoja, la cual mide unos 30 cm de largo.
Producción de caña de azúcar en México
En México se producen 5 tipos de azúcar: estándar, refinado, mascabado, blanco especial y con polarización menor a 99.20%. La diferencia entre los tipos de azúcar radica en el color, concentrado de pureza y contenido de sacarosa en el cristal.
La cosecha de caña de azúcar se efectúa en los meses de noviembre a julio. Aproximadamente el 90% de las cosechas se dan en los primeros tres meses del año.
En 2019 se plantaron 856 mil hectáreas en México, 1.0% superior a las del año anterior, lo que significó que su producción se incrementara 4.4%.
En Veracruz, principal productor del cultivo, la cosecha de caña de azúcar fue de 21.8 millones de toneladas, por las que se recibieron ingresos de más 16 mil millones de pesos.
México registra en el comercio externo del agroindustrial una balanza comercial favorable, incluso, su exportación anual rebasa el millón de toneladas, mientras que las importaciones rondan las 100 mil toneladas.
Condiciones favorables en el mercado externo posibilitaron al país, en 2019, una exportación de un millón 960 mil toneladas del endulzante, con ventas importantes a Estados Unidos, Marruecos, Canadá y Uzbekistán.
Recientemente, México ratificó un acuerdo de exportación de azúcar con Estados Unidos, uno de los mayores importadores en el mundo.