El chapulín de alas pálidas (Trimerotropis pallidipennis Burmeister), es una plaga que tiene como hospederos tanto a plantas cultivadas como silvestres. Sin embargo, prefiere a especies de pasto como el pasto navajita y banderilla. Cuando hay demasiada competencia por alimento, este chapulín puede llegar a infestar cultivos de maíz, trigo, algodón, cebada, sorgo y zanahoria.
El chapulín de alas pálidas consume de 30 a 100 mg de tejido vegetal diariamente. En grandes infestaciones puede consumir hasta el 60% del forraje total, dependiendo las condiciones en las que se encuentre la pradera. Además, puede realizar largos vuelos que permite la dispersión de la especie.
Taxonomía
Clase: Insecta
Orden: Orthoptera
Familia: Acrididae
Género: Trimerotropis
Especie: pallidipennis Burmeister
Ciclo biológico del chapulín de alas pálidas (Trimerotropis pallidipennis Burmeister)
La hembra de Trimerotropis pallidipennis puede ovipositar hasta 380 huevecillos durante toda su etapa reproductiva, pero en promedio deposita 8 ootecas con alrededor de 34 huevecillos cada una, los cuales entierra a una profundidad de 3.5 a 3.0 cm del suelo, ya sea en terrenos baldíos, orillas de caminos, canales o drenes.
La ninfa presenta de 5 a 6 estadíos que inician generalmente al mismo tiempo que inicia la primavera y cuando las condiciones del entorno son óptimas. El periodo de ninfa dura de entre 42 a 60 días, dependiendo el ambiente.
Los adultos machos miden de 2.5 a 3.5 cm de longitud y las hembras de 3.0 hasta 4.5 cm de largo. La coloración de los adultos, tanto de machos como de hembras, es grisácea o café, con dos bandas oscuras, estos colores les ayudan a mimetizarse con el ambiente y a escapar de sus depredadores.
Control biológico del chapulín de alas pálidas (Trimerotropis pallidipennis Burmeister)
T. pallidipennis cuenta con un gran número de enemigos naturales que ayudan a mantener la densidad de poblaciones de este chapulín en niveles endémicos. Entre los controladores se incluyen a las larvas de escarabajos de las especies Epicauta vittata Fabricius y Epicauta fabricii LeConte, que se alimentan de los huevecillos del chapulín. Además, las arañas y diversas especies de aves como codornices y garzas, serpientes, lagartijas, sapos y roedores, se alimentan de ninfas y de adultos de chapulín, ayudando a mantener en equilibrio al ecosistema.