Las plantas pueden fertilizarse suplementariamente a través de las hojas mediante aplicaciones de sales solubles en agua, de una manera más rápida que por el método de aplicación al suelo. Los nutrimentos penetran en las hojas a través de los estomas que se encuentran en el haz o envés de las hojas y también a través de espacios submicroscópicos denominados ectodesmos en las hojas y al dilatarse la cutícula de las hojas se producen espacios vacíos que permiten la penetración de nutrientes. Los nutrientes se absorben por las hojas con una velocidad notablemente diferente.
El nitrógeno se destaca por su rapidez de absorción necesitando de 0,5 a 2 horas para que el 50% de lo aplicado penetre en la planta. Los demás elementos requieren tiempos diferentes y se destaca el fósforo por su lenta absorción, requiriendo hasta 10 días para que el 50% sea absorbido. En el Cuadro 1, se detallan tiempos de absorción de algunos nutrimentos importantes.
Una vez que se ha realizado la absorción, las sustancias nutritivas se mueven dentro de la planta utilizando varias vías: a) la corriente de transpiración vía xilema, b) las paredes celulares, c) el floema y otras células vivas y d) los espacios intercelulares. La principal vía de translocación de nutrimentos aplicados al follaje es el floema. El movimiento de célula a célula ocurre a través del protoplasma, por las paredes o espacios intercelulares. El movimiento por el floema se inicia desde la hoja donde se absorben y sintetizan los compuestos orgánicos, hacia los lugares donde se utilizan o almacenan dichos compuestos. En consecuencia, las soluciones aplicadas al follaje no se moverán hacia otras estructuras de la planta hasta tanto no se produzca movimiento de sustancias orgánicas producto de la fotosíntesis
Cuadro 1.
Velocidad de absorción foliar para fertilizantes foliares
Nutriente Tiempo para que se absorba el 50% del producto
N (urea) 0,5 – 2 h
P 5- 10 días
K 10-24 h
Ca 1-2 días
Mg 2-5 h S 8 días
Mn 1-2 días
Zn 1-2 días
Mo 10-20 días
Fe 10-20 días
Tomado de Bertsch, 1995.
Fertilización foliar
La fertilización foliar por lo general se realiza para corregir deficiencias de elementos menores. En el caso de macronutrimentos tales como el nitrógeno, fósforo y el potasio, se reconoce que la fertilización foliar solo puede complementar, pero en ningún momento sustituir la fertilización al suelo. Esto se debe a que las dosis a aplicar vía foliar son muy pequeñas en comparación con las dosis aplicadas al suelo para obtener buenos rendimientos. En el Cuadro 2, se detallan algunas tolerancias de concentraciones de fertilizantes foliares.
Aún cuando la fertilización foliar es complementaria, existen condiciones bajo las cuales los fertilizantes foliares permiten obtener buenos resultados agronómicos. Estas situaciones especiales son aquellas que resultan en limitantes para la nutrición mineral de la planta debido a problemas del sistema radical.
La sequía es la primera de ellas y se produce cuando el suministro de agua es deficiente, afectando la alimentación radicular y produciendo trastornos severos en el desarrollo vegetal. Bajo esta situación, la absorción radical de nutrimentos es limitado y será necesario utilizar entre tanto, la vía foliar, mediante la aplicación de fertilizantes foliares.
Contrario a la falta de agua, el exceso o encharcamiento produce poca disponibilidad de oxígeno en el medio radicular inhibiendo de forma inmediata la absorción de agua y nutrimentos por la planta, siendo la fertilización foliar una alternativa para nutrir a la planta, debido a que durante las inundaciones se produce una falta de oxigeno en las raíces, que provoca la muerte de estas, disminuyendo la capacidad de absorción de nutrientes del suelo.
Las aplicaciones de agroquimicos tales como herbicidas, insecticidas, nematicidas o fungicidas producen inicialmente un efecto esterilizante en el suelo, disminuyendo la absorción de nitrógeno, fósforo y potasio principalmente en estados iniciales de desarrollo del cultivo. La aplicación de nutrimentos vía foliar, permitirá restaurar el adecuado balance nutricional en la planta.
En la practica, la fertilización foliar consiste en aportar nutrientes a las plantas asperjando los nutrientes o fertilizantes disueltos en agua sobre las hojas de las plantas. Las plantas son capaces de absorber nutrientes a través de sus hojas e incorporarlos a su metabolismo.
Cuadro 2.
Tolerancia de concentración de nutrimentos en aplicaciones foliares
Nutrimento Fertilizante Kg/400 L agua (*)
Nitrógeno Urea 3-5
NH4NO3, (NH4)2HPO4, (NH4)2SO4 2-3
NH4Cl, NH4H2PO4 2-3
Fósforo H3PO4, otros (ver N) 1,5 – 2,5
Potasio KNO3, K2SO4, KCl 3-5
Calcio CaCl2, Ca(NO3) 2 3-6
Magnesio MgSO4, Mg(NO3) 2 3-12
Hierro FeSO4 2-12
Manganeso MnSO4 2-3
Zinc ZnSO4 1,5-2,5
Boro Sodio borato 0,25-1
Molibdeno Sodio molibdeno 0,1-0,15
(*) 400 L, cantidad suficiente para 1 ha de cultivo.
Tomado de Fageria, et al. 1997
Los daños causados por heladas son por lo general la pérdida de follaje, las aplicaciones de nitrógeno ayudan a restaurar el área foliar afectada y se ha indicado que el potasio aplicado foliarmente en forma preventiva, puede atenuar los daños por el frío. La salinidad de los suelos es otro factor que afecta la absorción de agua nutrimentos por la planta.
Las sales aumentan la succión osmótica de la humedad del suelo, lo cual aumenta la retención de agua en el suelo, y como consecuencia afecta el movimiento de nutrimentos del suelo a la planta. Por otra parte, altas concentraciones de sodio provocan el bloqueo de la absorción de cationes importantes tales como el calcio, magnesio y potasio.
Por esta razón, el uso de fertilizantes al suelo puede restringirse y la fertilización foliar puede ser una alternativa beneficiosa. Los desbalances entre cationes y aniones en el suelo, pueden provocar deficiencia de alguno de ellos en la planta y la fertilización foliar puede constituirse en una herramienta efectiva para complementar la falta de ese nutrimento.
Un pobre desarrollo radical producto de problemas por toxicidad de aluminio, por compactación de suelo o por un nivel freático muy alto, son otros de los factores que afectan la absorción de nutrimentos por la planta y convierten a la fertilización foliar en un medio importante para complementar la nutrición mineral de los cultivos.
En el mercado existen diversos fertilizantes foliares, cada uno con un perfil de ingredientes activos y nutrientes diferentes, lo que la elección de alguno de ellos dependerá de la necesidad que busquemos atender.