La cebada grano es una planta monocotiledónea anual perteneciente a la familia de las Gramíneas. Presenta espiguillas que se encuentran unidas al raquis, dispuestas de forma que se cubren unas a otras. Sus hojas son estrechas y de color verde; en el punto en que el limbo se separa del tallo al terminar la zona envainadora de la hoja, se desarrollan dos estípulas que se cruzan por delante del tallo, y una lígula corta dentada posicionada contra éste.
La planta suele tener un color verde más claro que el del trigo; las flores tienen tres estambres y un pistilo de dos estigmas.
El fruto es un grano con las glumillas adheridas, con un tamaño que depende de las condiciones en donde se desarrolle, variando de los 6 a los 9.5 mm de longitud por 1.5 a 4 mm de ancho. Este grano, a su vez, es un cereal de gran importancia tanto para animales como para humanos y es el quinto cereal más cultivado en el mundo, dándosele un uso principalmente industrial para productos como la cerveza.
Producción de cebada grano en México
En México la mayor producción de este cereal se logra durante los meses de octubre a diciembre. Debido a la demanda de las cerveceras, la superficie sembrada del grano está incrementando año con año, sin embargo, en 2019 el volumen de producción disminuyó 4% por factores climáticos que incidieron en el volumen cosechado y rendimiento. De los estados productores de cebada, Guanajuato destaca debido a sus grandes producciones anuales, aportando el 36% de la producción total nacional, con 350 mil toneladas de cebada.
El liderazgo exportador mexicano de cerveza tiene sustento tanto en el grano de cebada de la cosecha nacional, como del que se abastece mediante la compra externa, en la cual, durante 2019 se importaron 122 mil toneladas.