La planta de plátano, es una especie de gran tamaño considerada como hierba, ya que sus partes más altas mueren y caen al suelo al terminar la estación de cultivo. Es una planta perenne porque de su base brota un parte llamado “hijo”, que reemplaza a la planta madre. La parte del tallo, es en realidad su pseudotallo. Las hojas son de textura lisa y son de las más grandes del reino vegetal. La planta de plátano produce de 300 a 400 frutos por espiga, con un peso aproximado de 50 kg.
El fruto es alargado en forma de media luna y mide alrededor de 15 cm de largo. Presenta una cáscara amarilla y gruesa, con manchas negras que al quitarla se encuentra una pulpa carnosa color amarillo claro, dulce y con una gran cantidad de semillas blandas. Este fruto cuenta con diversas variedades como el plátano tabasco, manzano, enano y macho, el cual incluso se puede freír.
Producción de plátano en México
Durante el año se cuenta con una producción constante de plátano, con un promedio mensual de 200 mil toneladas.
El plátano es el tercer fruto más importante. En 2019 se cosechó en 16 estados, de los cuales Tabasco y Chiapas, suman 55% del volumen de la producción nacional con una producción mayor a la del año anterior.
Chiapas es el principal productor del plátano. Sin embargo, las mayores cotizaciones del fruto las recibe Tabasco con 3 mil 586 pesos por tonelada cosechada, lo que genera un valor de producción de 2 mil 118 millones de pesos.
El incremento de la superficie con platanales y los mejores rendimientos de cosecha se han traducido en una mayor oferta mexicana para el mercado interno y externo.
Estados Unidos y Japón son líderes en las compras del fruto mexicano. Estas han aumentado significativamente, alcanzando poco más de 450 mil y 57 mil toneladas respectivamente.
En 2019 se sembraron más de 80 mil toneladas, las cuales se cosecharon casi a la totalidad, alcanzando un volumen de 2 mil 399 toneladas con un valor de 8 mil 818 millones de pesos.